PALABRAS DEL PRESIDENTE POR EL DIA INTERNACIONAL DEL COOPERATIVISMO

En oportunidad de celebrase la semana del cooperativismo quiero dejar una reflexión sobre la importancia que tiene para las cooperativas la participación, el compromiso y el sentido de pertenencia de sus asociados; y la importancia que tiene para la sociedad que las cooperativas sean conducidas respetando los valores que inculcaron los pioneros.
Sin lugar a dudas el mayor activo de una cooperativa son sus asociados, pero la mayor fortaleza es tener asociados con valores.
El principal baluarte del cooperativismo es nuestra participación; la de personas comunes, que asumiendo un rol protagónico en los procesos socio-económico de la sociedad en que vivimos, y con un accionar cimentado en principios y valores solidos logra que la empresa cooperativa sea un exitoso sistema que armoniza los intereses humanos recibiendo ayuda y colaboración de los demás, y ofreciéndola en reciprocidad.
Así como nuestros padres nos infunden los valores familiares, es nuestra responsabilidad, la de los dirigentes que hoy estamos en las cooperativas, inculcar los valores del cooperativismo. Si tenemos padres y dirigentes con valores, entonces tendremos hijos, cooperativistas y ciudadanos con valores.
Solidaridad, democracia, honestidad, humildad, esfuerzo, responsabilidad y fraternidad son valores que debemos, con el ejemplo, inspirar en nuestros asociados quienes hoy circunstancialmente estamos ocupando cargos dirigenciales.
La viabilidad económica y la responsabilidad social son posibles, si entendemos que la solidaridad es una condición compartida entre el esfuerzo propio y la ayuda mutua. El directivo cooperativo que en sus funciones solo se fije en el aspecto económico sin poner todo su talento, sensibilidad y esfuerzo para servir mejor a los demás, no ejerce con dignidad y decoro su papel de cooperativista; no está actuando con ética solidaria. El cooperativista que solo piensa en los beneficios sociales y no le pone toda su constancia y capacidad a la producción de su empresa cooperativa, no está ejerciendo con ética solidaria sus funciones de directivo.
Los invito a participar activamente de las instituciones de la economía social, a mejorarlas, a transmitir sus valores, ayudando de esta manera a que nuestra sociedad sea cada día un poco más justa.
Mi saludos y reconocimiento a todos los cooperativistas.
MARIO OSCAR TOUZ
Presidente